miércoles, 24 de marzo de 2010

Día agitado

Fue un martes 23 movidito. Por empezar me levanté 5 minutos antes y llegué temprano a la escuela. Como era el cumpleaños de un compañero, llevaron una torta, le cantamos el feliz cumpleaños, le hicimos la malteada y él se sorprendió de nuestra actitud, creo, ya que es nuevo en el curso.
En Matemática sufrimos todos y cada uno de nosotros con esos ejercicios pedorros que en nuestras vidas vamos a usar y que no nos salió a ninguno. El martes tenemos prueba.
Los fideos del comedor estaban espantosos, más que nunca, pero no nos importó para cantarle nuevamente un feliz cumpleaños al cumpleañero con todo el comedor lleno.
Los preparativos de la fiesta están a full: cambio de decoradora. Las chantas que nos quisieron sacar un ojo a cada uno por un par de telas y sillones ya fueron. De hecho, me perdí mi descanso y mi merienda en la casa de otra decoradora mucho más completa, con experiencia y materiales, que les decoró a varias amigas en su fiesta de 15 y, lo más gracioso, fue que conocía a las chantas y que habían venido a ella para pedirle las cosas, que nunca habían echo nada y ni siquiera eran decoradoras. Chau chicas, suerte.
De la casa de la decoradora, que nos tuvo unas cuantas horas ahí, fuimos a la clínica porque operaron a una amiga de apendicitis. Ella está bien, con su humor característico y no pierde la sonrisa, era una operación fácil igual. Mañana ya sale.
Finalmente fuimos a averiguar del catering y salimos con los ojos abiertos. Sabemos que es lo más caro de la fiesta y que con eso se nos va el presupuesto a la mierda, pero preferimos gastar un par de pesos más en un lugar que conocemos calidad, variedad, atención y sabor a ahorrar 10 pesos y no comer bien. Sí, se nos van 30.000 con el pollo al horno y los sanguchitos gente!
Llegué a mi casa hambriento, con frío, cansado, sediento y sucio a eso de las 9 y 20. A las 10 era el cine y mi tía que no quiero ya me estaba esperano, sentada, toda pituquita como es ella, charlando con mi mamá que esperaba a que se hornee la tarta en el horno. Así que post-comentarioreferidoalhorario me fui a bañar y salimos rajando. Obviamente la tarta quedó para más tarde. En el día había comido las galletitas del desayuno, un bocado de esos fideos, unas galletitas saladas y los restos de pochoclos del domingo.
El cine no fue a las 10, sino a las y 20 y después de todo el lío que armó mi tía por el estacionamiento, que no llegaba temprano, que no iba a haber entradas, que yo era igual de impuntual que mi mamá, etc. la película empezó y con ella mis bostezos. Me resfrié, estornudé toda la película y me sonaba la nariz. Cabecié unas cuantas veces, pero la peli estuvo buena. Me tuve que fumar el mal aliento del de atrás por 2 horas y el ruidito del que abría los caramelos.
Para cuando llegué a casa, cerca de la 1, ví que me había hablado ésta chica, quien seguramente estaba en su fiesta que, como habrán visto, no fui porque mis amigos no iban por diferentes motivos. Entonces fui a la heladera y saqué un yoghurt. Eso fue toda mi cena y en total, las pocas calorías que entraron.



Hoy devoré las papas fritas, la tarta y los panchos. Mi panza se va para los costados, empiezo dieta?

6 comentarios:

  1. Nooo las pancitas son lindas!!

    BEsos

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  2. Se usa el rollito éste año! jaja. Hablando en serio, llego a ver un rollito y empiezo con los abdominales.

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  3. Ouch me hiciste acordar lo mucho que nos costo hacernos la fiesta, pero QUE FIESTA NOS MANDAMOS! Jaja.
    Cuesta y es un lío pero al final cuando estas ahí valoras todo el esfuerzo.
    Beso (:

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  4. Si supieran lo que nos costo a nosotros hacer la fiesta, ni les digo que no pudimos viajar a Bariloche porque la empresa nos estafo...

    Ahora que lo pienso, que chiquitos que son!!
    besotes

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  5. Jajajaja, sí, realmente el esfuerzo lo vale. La disfrutás más a llegar y tener todo servidito, la hace más propia.

    No te puedo creer que los estafaron! Son una manga de hijos de puta. Por como somos nosotros, el juicio que hubiesen tenido!!

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